De nuevo Grecia, de nuevo calidad y de nuevo mi rendición ante un discazo de heavy power metal.
Ya son unos años escribiendo en Rockmania, y mi «jefe» y amigo Alfonso, entiende y comprende mis gustos y si él me dice escucha esta banda que es muy «tuya» pues nada, lo hago y me rindo, sin más. Este tipo de música, este tipo de heavy, power, con alguna pincelada progresiva y con una intensidad/emotividad fuera de toda duda me puede, me conquista y me atrapa y genera en mí la ansiedad de tener que comprar el cd para degustarlo en casa a toda «ostia».
Y es que estos griegos me han conquistado. La primera toma de contacto fue «Sea of lies» y que mi adorado Hansi Kusch cantara en ella, fue un elemento más en la ecuación. Tema que me encantó de primeras y que provoco en mí, aparte de la recomendación, la necesidad de escuchar el disco entero. Después de una primera toma de contacto, el disco me pareció muy interesante, tras una segunda escucha me pareció genial y al finalizar la tercera, ya estaba rendido al poder de los griegos.
Y ojo, que no son «novatos» en estas lides metálicas, pues llevan en activo desde 1995, pero como por todos es sabido, mantener y llevar adelante una banda de metal es bastante complicado y conseguir grabar discos y darse a conocer más todavía. Dicho esto, gran fichaje por parte de RPM, pues Innerwish derrochan calidad en cada composición.
Y la prueba está en que han transcurrido ocho años desde su último lanzamiento de título homónimo. Aunque he de decir que los ocho años de espera han merecido la pena. Al menos para mí, pues aún no conociendo la banda, si con este disco he caído rendido a sus pies, las pinceladas que he podido escuchar de su anterior trabajo, demuestran que el salto de calidad es acorde al tiempo de espera.
Y si a la ecuación de buena música, maestría en las composiciones y calidad a raudales, le añadimos un artwork tan impresionante como este, realizado por Giannis Nakos de Remedy Art Desing, pues nos entrega un resultado tan espectacular que no puedes por menos que invertir los dineros y comprar sin dudar. Es tan espectacular, con tanto detalle y tan bien ejecutada que merece ser observada mil y una veces.
La banda, tras varios cambios, aunque si no he averiguado mal, estable desde 2016 esta conformada por:
- George Eikosipentakis a las voces
- Manolis Tsigos a las guitarras
- Thimios Krikos a las guitarras
- Antonis Mazarakis al bajo
- Fragiskos Samoilis a la batería
- Georgios Georgiou a los teclados
Pocos discos he escuchado este año que me hayan atrapado tan rápido y tan bien, y es que este disco, a través de sus once temas, me ha hecho vibrar y disfrutar como un enano.
Porque las melodías rebosan por cada surco del trabajo, la fuerza y potencia de cada golpe y cada riff provocan la necesidad de subir el volumen y disfrutar más y más, la emotividad y epicidad que desprende cada nota genera la necesidad de cantar y disfrutar con ellas. Y es que cualquier elemento que los amantes del género como yo, buscamos y necesitamos como si de una droga se tratara, están dentro de este trabajo. Sencillamente espectacular, adictivo y sobresaliente.
Desde los primeros riffs de «Forevermore», hasta los últimos estribillos de «Breathe» la banda nos demuestra cómo hacer música de calidad, convertir canciones en himnos tras apenas dos escuchas y como conjugar la fuerza y potencia con la melodía y la emotividad/epicidad no está para nada reñido, al contrario, bien conjugado da el resultado perfecto, este disco sin ir más lejos.
¿Queréis un disco con once himnos? Pues este es vuestro disco. Y es que pocas veces me pasa, pero me cuesta la vida destacar algún tema por encima del resto. Quizás «Sea of lies» por ser mi primer contacto con la banda, pero es, por ejemplo, el estribillo de «Forevermore» no soy capaz de quitármelo de la cabeza. Los riffs de «Soul assunder» son completamente afilados y veloces. «Higher» tiene un aire más «hardrockero» sin perder la esencia hevaymetalera de la banda que me vuelve loco. La canción homónima, «Ash of eternal flame» es épica en estado puro. Con «Hands of doom» os prometo que os vais dejar las cervicales a ritmo de los riffs y golpes de batería… y como en todo disco que se precie, también tenemos el momento más «calmado» y emotivo, en este caso el midtempo rozando la balada «Once again» donde el derroche de sentimientos es superlativo…. y estos son pequeños ejemplos. Os convido y os animo a que os escuchéis el disco entero.
En resumen, un tremendo discazo de estos Innerwish, que han destrozado mis sentidos con tanta calidad y que han ganado un fan mas de por vida. Discos así, son los que me llevaría a una isla desierta, ya que no me canso de escucharlos nunca.
Haceros un favor, de verdad, escuchad «Sea of lies» y dejaros llevar y atrapar por el poder griego.
Fotografías cortesía de la web oficial de Innerwish