Llega diciembre y uno piensa: bueno, último mes del año, los discos del año ya están más o menos claros, no habrá ningún sobresalto. Sería lo normal, pero van y llegan estos suecos, se sacan de la manga este pedazo de disco y, uno piensa, por qué, por qué me hacéis esto…. y por otro lado piensa, joder qué pasada….
Porque estos Gomorra son una pasada, con su heavy metal clásico con acercamientos al thrash metal y algún tinte más powermetalero, que ya me sorprendieron mucho con su anterior disco de 2020 «Divine Judgement» y en este año que finaliza nos regalan otro discazo.
No en vano, el guitarrista y fundador de Gomorra, Damir Eskic es guitarrista de los thrashers germanos Destruction, y aquí creo que da más rienda suelta a sus múltiples influencias, aunque ya digo, las bases heavy clásicas y las bases thrasheras están ahí, aflorando como margarita en primavera.
De nuevo han contado con el artista Gyula Havancsak para diseñar la portada y de nuevo el trabajo es de lo más espectacular, y de nuevo, como en el anterior trabajo, lo han grabado y producido en los Little Creek Studios a cargo de VO Pulber.
Y en cuanto a lo musical, pues de nuevo la fórmula repetida anteriormente, con un sonido muy definido y aportando algunos matices en su evolucion musical.
Guitarras veloces y afiladas, bajo al más puro estilo Metallium, baterías sencillamente abrumadoras y la voz de Jonas cada vez más agresiva y rasgada.
La banda sigue formada por:
- Jonas Ambhul a las voces
- Damir Eskic a las guitarras
- Dominic Blum a las guitarras
- Arman Hadzic al bajo
- Stefan Hosli a la batería
También tenemos la colaboración de Laura Guldmond de Burning Witches que canta a duo con Jonas el tema «Stand United».
Once temas componen el disco y, al igual que en «Divine Judgement», se pasan volando, canciones directas, veloces e intensas, hacen del trabajo un gran disco que harán las delicias de cualquier amante del heavy metal y, como veréis en breve, se han colado, por derecho propio, entre mis diez discos preferidos de mi top anual.
Abre el disco «Reflection of Souls», intro que desemboca en «War Of Control», primer puñetazo en la cara de los suecos. Riffs vertiginosos a caballo entre el thrash y el heavy, sección rítmica aplastante, con un bajo que resuena por el tema y la voz de Jonas agresiva y melódica como nunca. Carta de presentación notable para abrir un disco.
«A chance for the Better», es el siguiente corte, más powermetalero pero sin perder la esencia y el sonido de Gomorra. Gran trabajo de la dupla de guitarras de Damir y Dominic, con una parte central donde se van intercambiando los solos, realmente brillante.
«Stand United», cuarto corte del disco, nos presenta a unos Gomorra mas trues que nunca, se nota la colaboración de Laura de Burning Witches, pues este tema es un tema denso, pesado y heavy a más no poder. No podrás parar de mover la cabeza….
«Dealer» es el siguiente tema, y aquí la vena thrash sale a relucir. Temazo veloz y contundente, donde las guitarras parecen desprender humo al roce de la pua con las cuerdas, ¡¡¡Qué riffs!!!. Thrash metal en estado puro.
«Isolation» es el sexto tema y volvemos a disfrutar de un tema de corte heavymetal de escuela. Ritmos galopantes, estribillos pegadizos, vamos el ABC del género, que bien conjugado es infalible, como lo es esta canción.
«Green Gold», séptimo tema, por fin nos dan un ligero respiro, con un tema algo más calmado, pero donde sorprenden por la introducción de ligeros guturales en algunas partes del tema. Tema en el cual conjugan muy bien las partes mas heavys y pesadas con las más power y melódicas de los estribillos. Un buen respiro despues de tanta tralla.
«Lost in Darkness» es el octavo tema y solo diré una cosa: Iced Earth en estado puro. Este tema podría entrar tranquilamente en «The dark saga» o «Somenthing wicked this way comes» de Iced Earth sin problemas. Temazo con una intensidad y un sentimiento espectacular y que solo espero poder disfrutar alguna vez en directo, si se pueden dejar ver por España.
«Rule of Fear» es el noveno tema y el principio es más Manowar que los propios Manowar con un grito de Jonas espectacular, demostrando que esta pletórico en todo el disco. Después el tema deriva en una canción a caballo entre el thrash de las partes rítmicas y el heavy de los estribillos. Sencillamente genial.
Y para finalizar otros dos trallazos donde nos demuestran la forma tan genial y efectiva de entremezclar dos estilos tan «dispares» como el thrash y el heavy como son «All is lost» y «End of the world», donde, como en todo el disco en sí, nos enseñan como conjugar los dos estilos consiguiendo ese sonido tan particular y espectacular.
En definitiva, disco que, aunque lleva unos pocos días en el mercado, se ha convertido por derecho propio en digno de estar en mi top anual y favorito de mi colección particular.
Gran trabajo de estos suecos, que espero sigan grabando discazos así y que ojalá puedan embarcarse en alguna gira y pasen por España.
Fotografías cortesía de la web oficial de la banda.