Ya tenemos entre manos el nuevo trabajo de una de mis bandas favoritas y de mayor proyección del panorama actual.
Hablo de Moonlight Haze, la banda italiana de power metal sinfónico de la cual me enamoré hace unos años y que a cada disco dan un paso más para ser de las grandes del panorama.
Agradecer desde aquí a Marc Gutierrez de Empire Zone Magazine, que me incitara a empezar a escribir reseñas y que lo hiciera descubriéndome a esta gran banda, dado que el flechazo con ellos fue inmediato, y gracias a eso, aquí estoy escribiendo estas líneas en Rockmania.
Desde aquel 2019 donde los conocí, la progresión de la banda ha ido en continuo ascenso y en este «Animus» lo han vuelto a demostrar. Composiciones de muchísimos kilates dan forma a este trabajo con el cual me han vuelto a conquistar desde las primeras notas.
La banda la siguen formando:
- Chiara Tricarico a las voces (limpias y guturales)
- Giulio Capone a la batería
- Alesandro Jacobi al bajo
- Alberto Melinato a las guitarras
- Marco Falanga a las guitarras
Si algo caracteriza los trabajos de Moonlight son las portadas tan bonitas y espectaculares y en este «Animus» no iba a ser menos. Han vuelto a contar con Beatrice Demori, artista que ya realizó los artworks de sus dos anteriores discos «De Rerum Natura» de 2019 y «Lunaris» de 2020. Es tan bonita que me quedo embelesado cada vez que la miro, os invito a que la veáis vosotros mismos porque es sublime.
El disco, como no, ha sido masterizado y mezclado en los Domination Studios del Sr. Simone Mularoni y el resultado ha sido, si cabe, más espectacular todavía que en los dos discos anteriores.
Suena limpio, contundente, emocionante y todos los instrumentos se oyen por un igual. Un trabajo fenomenal.
Y musicalmente, pues, de nuevo, Moonlight nos dan 11 temazos de power sinfónico, duro y dulce, contundente y sentimental, único como sólo ellos saben hacer. Se han forjado un sonido y una forma de hacer canciones que tan sólo con escuchar las primeras notas de un tema, sabes que son ellos.
Ya a finales de 2021, en diciembre, no dieron un «a little taste» de lo que se nos venía encima. El primer single «Animus», fue todo un pelotazo y un golpe durísimo a la línea de flotación de un servidor. Me quedé tan extasiado con el tema, que hoy después de haber escuchado el disco en bucle, aseguro que es el mejor tema de todo el disco. Intenso, emocionante y con una letra tan optimista que me provoca tanta alegría que las lágrimas resbalan por mis mejillas de la propia emoción en cada escucha.
Y el videoclip que es una de las declaraciones de intenciones más bonitas que he visto.
Y del resto del disco, la verdad es que destacaría todas las canciones porque todas son espectaculares, aunque algo por encima del resto están «It’s insane» que fue el tercer single y que es un tema super bailable e ideal para cantar y saltar en concierto al ritmo, «Never say never» donde los contrastes de la voz de Chiara me dejan alucinado, como desprende dulzura y rabia al mismo tiempo y con el mismo timbre de voz, algo asombroso.
Y por último quiero destacar el tema «A ritual of fire», porque es lo más power y menos sinfónico que han hecho nunca, tema tan corto como directo, sin piedad y sin tregua.
En resumen, uno de los mejores discos del año, sin duda, y que los tiene que encumbrar definitivamente a la cúspide del género.
Deseando estoy de que me llegue a casa el preorder para completar la trilogía y poder lucir mi camiseta con orgullo y ojalá, en un futuro no muy lejano los pueda ver encima de un escenario por aquí, porque seguro que, si vienen, ahí estaré yo.
Hacedme caso, y escuchad el disco, dejaros atrapar por su hechizo y disfrutad como nunca de música hecha con el corazón y que va directa al corazón.
Imágenes extraídas de la web oficial de la banda.
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