Lejos quedan atrás los tiempos del proyecto de Jevo de hacer canciones divertidas versionando temas clásicos del rock y el metal. Lejos queda aquel 2007 donde Jevo se lanza a la piscina y crea al El Reno Renardo, que en principio fue un one man band, dado que el propio Jevo se encargó de todos los instrumentos, voces y demás.
Y lo que comenzó como un proyecto extraño, dado que en aquellos tiempos casi nadie daba discos con descargas gratuitas ni nada similar, ha terminado siendo una de las mejores bandas del panorama nacional.
Un soplo de aire fresco, de divertimento entre tantos «trues» del metal, que, a mí, desde aquel 2007 me ha flipado. Me encanta decir que soy seguidor del heavy metal y demás, y que disfruto cual gorrino en charca, escuchando al Reno Renardo.
Si es que encima hacen giras y todo, e incluso se atreven a sacar a su mascota Reno a retozar por los escenarios. Ni los Maiden, hombre…jajajaj. (de hecho no sé como se llama la mascota pero es un reno, así que ….).
Y ojo, que son una pedazo de banda y unos grandes músicos, que han ido ganando con el paso de los discos y los años. Y lo de Jevo a las letras no tiene parangón. Currarse esas letras y esas rimas son dignas de estudio.
E insisto, lo que parecía un proyecto sin más, ya consta de 8 discos con este último, incluido un recopilatorio de versiones, vamos que ni tan mal.
La formación es la siguiente para los rezagados que no lo sepan todavía:
- Jevo Jevardo a las voces y guitarras
- Mikel Martinez a las guitarras y solista
- Ander The thunder al bajo
- Ivan Cormen a la batería
He de decir que en cada disco han ido embruteciendo su sonido, madurándolo y dándole sus propias señas de identidad a su música (aparte de las letras). Guitarras duras como el acero, bajo ruidoso cual trueno inmortal, y baterías mas aplastantes que el propio martillo de Thor, hacen que su sonido sea reconocido desde las primeras escuchas.
En cuanto a la portada, como es costumbre en cada disco, nos describe de que va a tratar el tema, y en este, más significativo que ver pelear a un unicornio contra un reno en una montaña con tridentes, es de lo más divertida (y un clarisimo homenaje a la portada del single «Run to the hills» de Iron Maiden).
En este último disco nos damos cuenta, realmente, que el mundo se va a la mierda, que, entre pandemias, volcanes, vox, youtubers, monguers y mamarrachos estamos jodidos. Fuera bromas, nos encontramos con 15 temas de los más cañeros que han realizado y con las letras más acidas que han brotado de las neuronas de Jevo.
Porque una de las particularidades más «cañeras» de las letras de Jevo es la forma de decir las verdades sin ofender ni caer en los términos soeces. Ejemplo claro es el tema «Mamarrachos», donde a los fachas les da un repaso impresionante.
Ya empezando con la Intro emulando al gran Ennio Morricone con «El Reno, el Feo y el Malo» (versión de la mítica canción «El Bueno, el Feo y el Malo») vemos que la cosa va en serio. Después nos describen como todo se al carajo con «El Mundo Se Va a La Mierda» y esto ya no para.
Como digo, temas cañeros y rabiosos, letras ácidas que no se curan ni con Almax, y desde que empiezas a escucharlo, ya no puedes parar hasta el final.
Y, como en todos los discos, también hay cabida para temas mas cachondos y festivos, como en este caso el tema «La Solitaria» (ya podéis imaginar de que va la letra…).
Ojito también al tema «Madre», por la letra que nos representa a todos los que ya empezamos a peinar canas, ya que seguro que hemos sufrido todo lo que cuentan. Y en la música, ojito porque es la versión de uno de los temas más intensos de una de las bandas mas espectaculares de Alemania (tendréis que adivinarla).
Y también como en cada disco, el último tema, el largo del disco, y donde demuestran que son grandes músicos, porque te meten en 10 minutos trozos de temas de los más clásicos del metal, con una maestría digna de estudio, ya que no se nota en ningún momento que pudiera ser un corta-pega, sino que es un tema elaborado. Podrás escuchar a Iced earth, Accept, Helloween, Van Halen, Megadeth, vamos que es un temazo largo y extenso y donde dan el do de pecho como en cada disco.
En resumen, muy buen disco y que continúa en la línea ascendente de los últimos años, que hará las delicias de los fans (incluido yo) pero que escocerá entre los mas «trues» del metal. Como dicen en el tema «Eres true» de su anterior «hosteopatia», «No soportamos letras de humor, pero nos chiflan Obus». Pues eso, si os consideráis trues o más metálicos que un clavo, este no será vuestro disco, por el contrario, si tenéis la mente abierta y os gusta la calidad y la diversión, alistaros en el ejército renil.
Fotografías obtenidas de la web oficial de la banda.